Las sequoias de la costa ocupan una franja estrecha de tierra de aproximadamente 750 km de longitud y 8-75 km de anchura a lo largo de Costa Pacífica de Norteamérica. La elevación del terreno varía de 30 a 750 metros, de vez en cuando, bajando hasta el nivel del mar y culminando los 920 metros Farjon, 2005. Suelen crecer en las montañas donde hay más precipitación debido a la humedad que despide el océano. Los árboles más altos y más viejos se encuentran en valles y barrancos profundos donde fluyen arroyos durante todo el año y la precipitación de la niebla es constante. Por su parte, las secuoyas que se sitúan por encima del nivel de la niebla, es decir, por encima de unos 700 metros, son más bajas y pequeñas debido a las condiciones meteorológicas: ambientes secos, fríos y excesivo viento. Además, el roble “tan”, pinos y los abetos “Douglas” a menudo comen el terreno de los secuoyas en estas elevaciones. Pocos “Redwood trees” crecen cerca del mar, debido al intenso ambiente salino y al viento. La niebla es de mayor importancia en la ecología del secuoya de la costa Redwood National Park.
La frontera norte de su extensión, se delimita por dos arboledas en el Chetco River en la periferia del oeste de las Klamath Mountains 25 kilómetros al norte de la frontera entre California-Oregon. Las poblaciones más grandes y más altas están en Redwood National and State Parks condados Del Norte y Humboldt Redwoods State Park Humboldt County, California. Esta zona nativa proporcionan ambiente único con lluvias estacionales fuertes hasta 2.500 mm o 100 pulgadas anualmente. El aire fresco costero y la niebla mantienen una humedad constante durante todo el año en este bosque. Varios factores, incluyendo las precipitaciones fuertes, crean una tierra con menos nutrientes de los necesarios, causando que las secuoyas dependan mucho de toda la comunidad biótica del bosque, con un reciclaje completo de los árboles muertos. Esta comunidad biótica incluye las siguientes especies: Coast Douglas fir, Western Hemlock, Tanoak, Pacific Madrone, y otros árboles además de una gran variedad de helechos Redwood sorrel, musgos y setas. Las secuoyas proveen un hábitat para una gran variedad de mamíferos, pájaros, reptiles y anfibios. Los troncos viejos de secuoya proveen un hábitat para el búho Spotted y amenazado a nivel federal y para el Marbled-Murrelet, especie de California en peligro de extinción.
La corteza gruesa, rica en taninos, combinada con follaje que empieza en las alturas por encima del suelo, suministran una buena protección de los daños causados tanto por fuego como por insectos, lo cual contribuye a la longevidad de las secuoyas de la costa. La secuoya costera más vieja conocida tiene alrededor de 2.200 años; muchas otras en zonas silvestres pasan los 600 años. Las numerosas declaraciones de la existencia de árboles aún más viejos, son incorrectas. Curiosamente, y debido al aparente período de vida eterna de las mismas, las secuoyas costeras se denominaron “Las secuoyas eternas” a principios del siglo XIX; en latín “Sempervirens” significa siempre verde o eterno, una coincidencia desconocida a todo aquél que nombró a esos gigantes.
La ubicación prehistórica de los fósiles del “Genus” es considerablemente mayor con una distribución cosmopolita que incluye Europa y Asia hasta hace 5 millones de años.
No hay comentarios:
Publicar un comentario