domingo, 30 de marzo de 2014

AUDREY HEPBURN



AUDREY HEPBURN nació en Ixelles el 4 de mayo de 1929, murió en Tolochenaz, Suiza 20 de enero de 1993 fue el nombre artístico de Audrey Kathleen Ruston, una actriz y humanitaria británica. Reconocida como icono de la moda y el cine, Hepburn estuvo activa durante la época dorada de Hollywood. Está considerada por la American Film Institute como la tercera mayor leyenda femenina del cine estadounidense.

Nacida en Ixelles, un distrito de Bruselas, Hepburn pasó su infancia entre Bélgica, Inglaterra y los Países Bajos, incluyendo a Arnhem que estuvo ocupada por los alemanes durante la Segunda Guerra Mundial. En Ámsterdam, estudió ballet con Sonia Gaskell antes de trasladarse a Londres en 1948 para seguir sus estudios de ballet con Marie Rambert y trabajar como corista en las producciones musicales de West End.

Después de aparecer en varias películas británicas y protagonizar la obra de Broadway de 1951, Gigi, Hepburn interpretó el papel principal de Roman Holiday 1953, el cual le valió un Óscar a la mejor actriz. Más tarde actuando en películas de éxito como Sabrina 1954, The Nun's Story(1959), Breakfast at Tiffany's 1961, Charade 1963, My Fair Lady 1964 y Wait Until Dark 1967, Hepburn recibió nominaciones a los premios Óscar, Globo de Oro y BAFTA y devengó un premio Tony por su actuación teatral la obra de Broadway de 1954, Ondina. Hepburn sigue siendo una de las pocas personas que han ganado un Óscar, un Emmy, un Grammy y un Tony. Hepburn fue la primera actriz en ganar un Oscar, un Globo de Oro y un premio BAFTA por una sola actuación: Roman Holiday en 1954.

Apareció en menos películas a medida que su vida siguió, dedicando gran parte de su vida posterior a Unicef. A pesar de haber contribuido con la organización desde 1954, trabajó en algunas de las comunidades más profundamente desfavorecidas de África, América del Sur y Asia entre 1988 y 1992. Fue galardonada con la Medalla Presidencial de la Libertad en reconocimiento a su labor como Embajadora de Buena Voluntad de Unicef a finales de 1992. Un mes más tarde, Hepburn murió de cáncer apendicular en su casa en Suiza a principios de 1993 a la edad de 63 años

Nacida como Audrey Kathleen Ruston en Ixelles/Elsene, un municipio de Bruselas, Bélgica. Era la única hija del inglés Joseph Víctor Anthony Ruston y de su segunda esposa, la baronesa Ella Van Heemstra, una aristócrata holandesa que era hija del ex gobernador de la Guayana Holandesa Surinam, el barón Aarnoud van Heemstra. El padre de la futura actriz añadió más adelante el apellido de su abuela materna, Catherina, a la familia; y su apellido se convirtió en Hepburn-Ruston. Tenía dos hermanos de madre, fruto de un primer matrimonio de su madre con el jonkheer Hendrik Gustaaf Adolf Quarles van Ufford: jonkheer Arnoud Roberto Alexander “Alex” Quarles van Ufford y jonkheer Ian Edgar Bruce Quarles van Ufford. Ella van Hemstra era descendiente del rey Eduardo III de Inglaterra y del consorte escocés James Hepburn, cuarto Conde de Bothwell, de quien Katherine Hepburn también se considera descendiente.

El padre de Hepburn trabajó con una compañía de seguros en Gran Bretaña, lo cual significó que la familia tuvo la oportunidad de viajar a menudo entre Bruselas, Inglaterra y los Países Bajos. Entre 1935 y 1938 Hepburn estudió en una academia privada y femenina en Kent, Inglaterra.

En 1935 sus padres se divorciaron, y su padre, simpatizante nazi, abandonó a la familia. Ambos padres eran miembros de la unión británica de fascistas a mediados de los años treinta, según Unity Mitford, amiga de Ella van Heemstra y seguidora de Adolf Hitler. Audrey llamó más adelante a este hecho «el momento más traumático de su vida». No sería hasta mucho más adelante cuando consiguió localizar a su padre en Dublín a través de la Cruz Roja. Desde entonces permaneció en contacto con él y lo apoyó financieramente hasta su muerte.

En 1939 se trasladó con su madre y sus dos hermanos de madre a la casa de su abuelo en Arnhem, Países Bajos. Pensaban que Holanda era un lugar seguro para evitar al ejército nazi. Hepburn acudió al conservatorio de Arnhem entre 1939 y 1945, donde estudió piano y ballet clásico, los cuales compaginaba con sus estudios escolares.

Su carrera como actriz comenzaría con el film educativo Holandés en siete lecciones. Después actuó en producciones musicales como High Button Shoes y Sauce Piquante. Su primer papel en una película fue en el film inglés One Wild Oat en el cual actuaba como recepcionista de un hotel. También actuó en papeles más pequeños como Young Wives' Tale, Laughter in Paradise, The Lavender Hill Mob, y Monte Carlo Baby. Durante el rodaje de Monte Carlo Baby fue elegida para protagonizar el musical de Broadway Gigi, estrenado el 24 de noviembre de 1951. La reportera Sidonie-Gabrielle Colette dijo sobre Audrey: «Voilà!, ¡ésta es nuestra Gigi!». Audrey ganó el Theatre World Award por su debut. Siguió actuando en este musical durante los seis exitosos meses siguientes.

Su primer papel de importancia fue en el film Secret People, en el cual realizaba el papel de una bailarina prodigio. Naturalmente, Audrey hizo todas las escenas de baile. Pero el papel que la catapultó a la fama, además de ser su primer papel en Hollywood, fue, junto a Gregory Peck, en Vacaciones en Roma, de William Wyler.

En un primer momento los productores querían a Elizabeth Taylor para el papel protagonista, pero el director William Wyler quedó impresionado por la prueba de cámara de Audrey, en la cual se dejó la cámara quieta y se le empezaron a realizar una serie de preguntas a Audrey, que no sabía que la cámara estaba grabando. Sus respuestas y sinceridad demostraron su enorme talento y Wyler no dudó en contratarla. Wyler dijo: «Tiene todas las cosas que busco: encanto, inocencia y talento. Además es muy divertida. Es absolutamente encantadora. No dudamos en decir que es nuestra chica». Su compañero de reparto, Gregory Peck, ya era una estrella consagrada y en el póster de la película su nombre tenía más importancia que el «presentando a Audrey Hepburn». Cuando acabó el rodaje, Peck llamó a su agente e hizo que le dieran la misma importancia a los dos nombres. Peck predijo que ella ganaría el Óscar. Ambos, Hepburn y Peck, conectaron durante el rodaje, incluso hubo rumores de que tuvieron una relación amorosa, rumores desmentidos por ambos. Sin embargo, Audrey añadió: «En realidad, sientes algo de amor por tu pareja en la película. Si vas a interpretar un romance, tienes que sentirlo. No lo puedes hacer de otra manera. Pero no lo lleves más allá del plató». Debido al gran éxito de Vacaciones en Roma, Audrey fue portada de la revista TIME el 7 de septiembre de 1953.

Su interpretación recibió las alabanzas de los críticos. «Aunque no es precisamente una recién llegada al mundo de la interpretación, Audrey Hepburn, la actriz británica que se mete en la piel de la princesa Anne, está espléndida, bellísima, alternando sus escenas de la realeza y las más infantiles durante su búsqueda de placeres básicos y del amor. Aunque sonríe al final de la película, ella sigue siendo una persona lamentablemente sola que hace frente a un futuro difícil». Audrey se refirió en el futuro a Vacaciones en Roma como su película más querida, ya que fue la que la hizo una estrella.

Después de los cuatro meses de rodaje de Vacaciones en Roma viajó a Nueva York para seguir con las funciones de Gigi. Antes de incorporarse al rodaje de Vacaciones en Roma, Audrey estuvo actuando con el musical en Los Ángeles y San Francisco. Esto fue posible ya que tenía un contrato con Paramount que le permitía tener doce meses entre película y película para dedicarse al teatro.

Durante los años siguientes, Audrey se convertiría en una de las actrices más reconocidas por su inigualable belleza natural, icono de la sencillez en la elegancia femenina y transparencia de personalidad. Fue considerada entre las más queridas y populares de la meca del cine y gozó de la amistad de casi todos sus compañeros de rodaje.

Durante estos años protagonizó Dos en la carretera, Cómo robar un millón, Una cara con ángel, My Fair Lady 1964, el famoso musical multioscarizado, y el que se considera el papel de su carrera, la Holly Golightly de Breakfast at Tiffany's 1961. Pero para Audrey su mejor papel fue, sin duda, el de la hermana Lucas en Historia de una monja. Ese papel, el conocer a su protagonista real, las similitudes —ambas eran belgas y habían sufrido la guerra— hizo que Audrey recapacitara mucho y se entregara más a sus labores humanitarias. Es, sin duda, una de las mejores películas de Audrey y del cine, pero muchas personas solo ven a Audrey como un icono de moda por su actuación como Holly en Breakfast at Tiffany's.

Audrey con su glamour y su belleza, nos demostró en Vacaciones en Roma que también valía como actriz y con su "I wanna say thank you to..." recibió el Oscar a la Mejor Actriz, el único que recibiría en toda su carrera.

Su interpretación de Holly Golightly en Desayuno en Tiffany's 1961 la convirtió en un icono del cine americano. Ella definió su papel como «el más jazz de mi carrera». Cuando fue interrogada sobre su nuevo papel dijo: «Soy introvertida. Actuar para ser una chica extrovertida es la cosa más difícil que he hecho en mi vida». El elegante vestuario que usó en la película estaba diseñado por Givenchy. Además, se puso mechas rubias en el pelo, look que también conservó fuera de la pantalla. Este papel, sin lugar a dudas el más popular de su carrera, estaba originariamente pensado para Marilyn Monroe. Truman Capote, el autor de la novela en que se basa la película, además de guionista, era un gran amigo de la polémica actriz. Cuando Marylin rechazó el papel debido a que quería dejar de interpretar a «Chicas ingenuas» y este le llegó a Audrey, el personaje de Holly sufrió varios cambios; entre ellos, el personaje dejaba de ser bisexual para ser heterosexual. Además, su trabajo de prostituta de lujo queda mucho más difuso y en ningún momento se hace la más mínima referencia a este hecho. Su magnífica interpretación recibiría otra nominación a los Óscar, pero el premio fue a parar a la italiana Sophia Loren por Dos mujeres.

Hepburn se había estabilizado como una de las actrices más populares de América. En 1963 le cantó el «Feliz cumpleaños» al presidente Kennedy como Marilyn Monroe había hecho un año antes. A pesar de todo ello, Audrey vivió una vida mucho más reservada y humilde que la mayoría de las estrellas de Hollywood, como demuestra el hecho de que viviera en casas, no en mansiones, y que cultivaba su propio huerto, además de su vocación por UNICEF y sus múltiples viajes a África.

Falleció de cáncer de colon en su casa de Tolochenaz, en Suiza, el 20 de enero de 1993 a los 63 años de edad. Ese mismo día, Elizabeth Taylor dijo que «Dios estaría contento de tener un ángel como Audrey con Él».

A pesar de que nunca hizo ostentación de joyas y rechazó ser imagen de la marca, la famosa joyería Tiffany, la que había popularizado en Desayuno con diamantes, le dedicó un escaparate con la frase «My Huckleberry friend», de la canción “Moon River”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario