Se denomina RENACUAJO a las larvas de los anfibios anuros, y por extensión,
también a los de los demás anfibios como las salamandras,
los tritones y las cecilias.
En ese estado respiran mediante branquias externas o internalizadas y residen
permanentemente en el agua.
Las larvas de los anuros carecen de patas, y poseen una larga cola con la que nadan como la mayoría de
los peces,
por ondulación lateral. Nacen
con branquias externas, pero éstas quedan pronto internalizadas por el
desarrollo del opérculo, hasta quedar encerradas en un saco branquial que
comunica con el exterior sólo por el espiráculo. Cuando un renacuajo alcanza la
madurez necesaria, sufre una metamorfosis en la que gradualmente
crecen sus patas y absorben su cola por apoptosis muerte
celular controlada. Los renacuajos de los anuros son fundamentalmente herbívoros,
con una especial adaptación para raer superficies, para lo que están dotados de
filas de dientecillos en torno a la boca los dientes labiales. En la práctica
se comportan como omnívoros, siempre capaces de adaptarse aceptablemente una
vida carnívora, llegando unas pocas especies a practicar el canibalismo si
las condiciones son muy duras.
Los renacuajos de los caudados no
son propiamente renacuajos. Nacen sin patas, pero las desarrollan prontamente y
enseguida se parecen a los adultos, salvo por ser más pequeñas, menos
pigmentadas y por las branquias ramificadas que ostentan a los lados de la
cabeza. Suelen ser carnívoras, como los adultos. Algunas especies de caudados
presentan adultos con dos fenotipos distintos, como es el caso del ajolote,
en función de las condiciones ecológicas en las que vive. Un fenotipo
particular es el individuoneoténico de aspecto larval.
No hay comentarios:
Publicar un comentario