El PETRÓLEO
es una mezcla homogénea de compuestos orgánicos, principalmente hidrocarburos insolubles en
agua.
También es conocido como petróleo crudo o simplemente crudo. Se produce en el interior de la Tierra, por
transformación de la materia orgánica acumulada en sedimentos del pasado geológico y puede acumularse en trampas geológicas naturales, de donde se
extrae mediante la perforación de pozos.
En condiciones normales es un líquido bituminoso que puede presentar gran
variación en diversos parámetros como color y viscosidad desde amarillentos y poco viscosos como
la gasolina hasta líquidos negros tan viscosos que apenas fluyen, densidad
entre 0,66 g/ml y 0,95 g/ml, capacidad calorífica, etc. Estas
variaciones se deben a la diversidad de concentraciones de los hidrocarburos que componen la mezcla.
Es un recurso natural no renovable y actualmente también es la principal fuente de energía en los países desarrollados. El petróleo líquido puede
presentarse asociado a capas de gas natural,
en yacimientos que han estado enterrados durante
millones de años, cubiertos por los estratos superiores de la corteza
terrestre.
En los Estados Unidos, es común medir
los volúmenes de petróleo líquido en barriles de
42 galones
estadounidenses, equivalente a 158,987294928 litros, y los volúmenes de
gas en pies cúbicos
equivalente a 28,316846592 litros; en otras regiones ambos volúmenes se miden
en metros
cúbicos.
Debido a la importancia fundamental
para la industria manufacturera y el transporte, el incremento del precio del
petróleo puede ser responsable de grandes variaciones en las economías locales
y provoca un fuerte impacto en la economía global.
El petróleo
está formado principalmente por hidrocarburos, que son compuestos de hidrógeno y carbono, en su mayoría parafinas, naftenos y aromáticos. Junto con cantidades variables de derivados
saturados homólogos del metano
Es de
origen fósil, fruto de la transformación de materia orgánica procedente
de zooplancton y algas que,
depositados en grandes cantidades en fondos anóxicos de mares o
zonas lacustres del pasado geológico, fueron posteriormente enterrados bajo pesadas
capas de sedimentos. Se
originaron a partir de restos de plantas y microorganismos enterrados por
millones de años y sujetos a distintos procesos físicos y químicos. La
transformación química, craqueo natural debida al calor y a la presión durante la diagénesis produce,
en sucesivas etapas, desde betún a
hidrocarburos cada vez más ligeros líquidos y gaseosos.
Estos
productos ascienden hacia la superficie, por su menor densidad, gracias a la
porosidad de las rocas sedimentarias. Cuando se dan las circunstancias
geológicas que impiden dicho ascenso trampas petrolíferas como
rocas impermeables, estructuras anticlinales, márgenes de diapiros salinos, etc. se forman entonces los yacimientos petrolíferos.
Algunos científicos apoyan la
hipótesis del origen abiogenético del petróleo y sostienen que en el interior
de la tierra existen hidrocarburos de origen estrictamente abiogenético. Los
químicos Marcellin Berthelot y Dimitri Mendeleiev, así como el astrónomo Thomas
Gold llevaron adelante esta teoría en el mundo occidental al apoyar el trabajo
de Nikolai Kudryavtsev en la década de 1950. Actualmente,
esta teoría es apoyada principalmente por Kenney y Krayushkin.
La hipótesis del origen abiogenético
del petróleo es muy minoritaria entre los geólogos. Sus defensores consideran
que se trata de "una cuestión todavía abierta". La extensiva
investigación de la estructura química del queroseno ha identificado a las algas como la
fuente principal del petróleo. La hipótesis del origen abiogenético no puede
explicar la presencia de estos marcadores en el queroseno y el petróleo, así
como no puede explicar su origen inorgánico a presiones y temperaturas
suficientemente altas para convertir el queroseno en grafito.
La hipótesis tampoco ha tenido mucho
éxito ayudando a los geólogos a descubrir depósitos de petróleo, debido a que
carece de cualquier mecanismo para predecir dónde podría ocurrir el proceso.
Más recientemente, los científicos del Carnegie Institution for Science han
descubierto que el etano y otros hidrocarburos más pesados pueden ser
sintetizados bajo las condiciones del manto superior.
El petróleo
es una mezcla de productos que para poder ser utilizado en las diferentes
industrias y en los motores de combustión debe sufrir una serie de tratamientos
diversos. Muy a menudo la calidad de un Petróleo crudo depende en gran medida
de su origen. En función de dicho origen sus características varían: color, viscosidad,
contenido.
Por ello,
el crudo a pie de pozo no puede ser utilizado tal cual. Se hace, por tanto,
indispensable la utilización de diferentes procesos de tratamiento y
transformación para la obtención del mayor número de productos de alto valor
comercial.
El conjunto
de estos tratamientos constituyen el proceso de refino o refinación del
petróleo.
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