Entre
los cascos del Azabache es una novela del popular escritor
mexicano Francisco Lavín Marmolejo, escrita en el año de 2005 y donde todas sus
obras, son cuentos y novelas con valores humanos para lectores de ocho a ochenta
años con historias amenas y divertidas que apoyan a la formación de los jóvenes.
Cuando el humano piensa en
sus orígenes y analiza su cosmogonía, aplica los conocimientos de su religión o
sueña en la mitología de sus antepasados.
En el norte de México,
durante el año de 1930 se vive una aventura entre dos jóvenes, que conocen a un
indígena Kikapú, descendiente de un jefe de la tribu Sioux que vivió en el
siglo XIX, reconocido por su propio pueblo como un dirigente valiente y
visionario, comprometido con la preservación de las tradiciones y los valores
que caracterizan al hombre, pero sobre todo lo que su cultura ofrece a través
de la cosmogonía del ser humano y la manera de ser y de pensar de su tribu.
Los valores que caracterizan
a Tashunka Witko como jefe su tribu, se vuelven a presentar cincuenta años después
en la confluencia de los estados de Chihuahua, Coahuila y Durango a finales de
la revolución cristera.
“Todo el mundo lo amaba, sus
ojos atravesaban las cosas. Era un gran hombre y cuando a los treinta y dos
años murió, su alma se convirtió en un caballo prieto azabache”
Para nosotros las grandes
llanuras abiertas, las hermosas colinas onduladas y los ríos serpenteantes y de
curso enmarañado, no son panoramas salvajes.
Solo para el hombre blanco,
la naturaleza era salvaje y los habitantes de esas tierra eran gentes bárbaras.
Para nosotros era dócil. La
tierra era generosa y estábamos rodeados de las bendiciones del gran misterio.
Para nosotros no fue
salvaje, hasta que llegó el hombre blanco, el hombre velludo del este y con
brutal frenesí amontonó injusticias sobre nosotros y las familias que amábamos.
Cuando los mismos animales
del bosque empezaron a huir de su proximidad, entonces para nosotros empezó el
salvaje oeste.
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